lunes, 22 de septiembre de 2014

CHIBA Y SU HISTORIA



                                                                       


                                                             CHIBA Y SU POBLADO

Chiba es un héroe mítico surgido de la supuesta lucha entre los poblados de Baho y de Belelipa. Chiva capitaneando a 120 guerrero de Belelipa . Una lanza hirió de muerte a Chiba, sus seguidores echaron al suelo sus lanzas y lo rodearon como testimonio de su admiración, así murieron lanceados por los de Baho.
Todos prefirieron morir al lado de Chiba y acompañarlo al otro mundo, que vivir derrotados. La madre de nuestro héroe llamada Morihí, lloraba desconsoladamente la muerte de su hijo, hasta que oyó una voz que le decía: No llores, el llanto no saca a ningún hombre del sepulcro.
Chiba se hallaba en la región del otro mundo, y como allá se vive mejor, los jefes espirituales organizaron un gran banquete, pero existía un problema grave por el cual no podía acudir al  banquete Chiba, dado que al morir joven todavía no había adquirido el título de Aloboam, indispensable para entrar en la primera categoría social. – Eso nos indica que allí también hay lo que alguno llama ahora CASTAS SOCIALES-.
La única solución posible  es volver a la tierra para recibir de una forma expresa, su titulación, así que los  jefes le autorizaron un viaje rápido de ida y vuelta.
Enterados de su vuelta y llegada, los espíritus que habitaban este mundo, se prepararon para organizar una gran fiesta, durante la cual solemnemente le otorgarían el título de Aloboam. En dicho acto estaría rodeado de sus 120 guerreros que sacrificaron la vida por él. Lo importante es que durante la celebración ningún rayo de luz hiriera a Chiba y su séquito, ello anularía todo el proceso. Para ello se dispuso que todas las nubes del cielo bajaran para extender un manto que evitara la penetración de la luz durante su fugaz estancia en la tierra.
Tantos fueron los agasajos que recibió en el acto Chiba que les prometió establecerse en el pico de Santa Isabel, y allí vivirá tranquilo con aquellos que dieron la sangre por él.
Su madre Morihi, volvió a llorar sin consuelo por volver a perder a su hijo. Con el tiempo fue acusada de haber sustraído aceite de la sociedad de mujeres de la que, ella era presidenta. Desesperada se dirigió al barranco donde se había despedido su hijo, buscando su consuelo. El poblado entero se movilizó buscando a Morihi por todo el territorio y sin encontrarla, hasta que el mismo Chiba les dijo: < No busquéis más a mi madre, está conmigo en la región de los difuntos>
En efecto Morihi estuvo suplicando en la entrada del pueblo creado por su hijo, al final la dejó entrar con la condición que no probara  nada de la comida de los espíritus, al final pudo más su curiosidad y probó algo de banga (palmiste) al momento de comerlo, su cuerpo se espiritualizó, por lo cual en los proverbios bubis, se dice, << Morihi está en el otro mundo sin haber muerto>>.
El pico es conocido con el nombre de Obasa, las creencias dicen que en su cercanía está el poblado invisible que fundó Chiba. Si alguien intenta llegar los espíritus lo despistan y hace que se pierdan por la montaña. Para poder subsistir el poblado se convirtió en un poblado de cazadores.
Chiba posee sus propios perros de caza, que a veces atacan a los que merodean por el lugar, hasta se dice que los europeos los han visto y han oído sus aullidos. El pueblo de Chiba tiene hasta búfalos. A finales del siglo XIX parece que se extinguieron los búfalos pero constancia de su existencia la dan que los misioneros descubrieron en sus primeros contactos con los jefes bubis, cráneos, pieles, cuernos y pezuñas de estos animales. Existe un poblado actualmente muy modernizado que se llama Batoikopo , cuya palabra viene de :   Ba= Los  / Toi = Pretérito de toa vencer/  Kopo>= Búfalos/ resumiendo Batoikopo significa = Lugar donde vencieron a los búfalos.  En el diario de John Clarke se indica que cuando llegó por primera vez a Batoikopo en 1841, una mujer había sido herida por la acometida de un búfalo.
La fortaleza de ese pueblo estaba unida a la fortaleza del búfalo. Chiba , a veces autorizaba su caza, con algunas limitaciones, tal que no se podía descuartizar el animal en ese territorio , el cráneo siempre debía quedar en posesión del jefe del poblado, y hacer sacrificios para librar de los espíritus malignos ocultos en el búfalo.
Chiba siempre ha sido muy venerado por los cazadores. Hasta hace poco un sacerdote de Chiba lo veneraba en una cueva de Belelipa.   

Los datos están extraídos del libro del padre claretiano A. Martin del Molino, Los Bubis Ritos y Creencias.


Fernando García Gimeno     22 de Septiembre 2014

No hay comentarios: