domingo, 13 de febrero de 2011

La Valentía de un hombre

Me han llegado noticias que el día 11 inició una huelga de hambre Juan Tomás Avila Laurel con el fin de que se establezca una democracía en Guinea.

Primero diré que conocí a Juan Tomás en New York en la Universidad de Hofstra en una reunión de escritores que comentan, escriben o conferencian sobre Guinea Ecuatorial. Tomás de la etnia annobonesa, es un hombre de muy pocas carnes,cuyas novelas sobre la vida en Guinea reflejan su dinamismo y su buena percepción de la antropología africana, su literatura es como una cámara fotográfica que un periodista va pulsando cada vez que un acontecimiento sucede cerca de él. En la conferencia que dió a todos nos pareció corta, fue simpática pero con un trasfondo de solera, de calidad, de buen sabor.

Conocí de paso al presidente de Guinea Teodoro Obiang, cuando el Gobierno Colonial decidió enviar a la Academia de Zaragoza a un grupo de brillantes estudiantes de la Escuela Superior Indígena y este grupo apareció un día en el Estadio de Santa Isabel para lanzar algunas canastas en la pista de baloncesto. Recibí una llamada para facilitarles los balones ya que en aquel entonces era yo el Delegado de baloncesto de Fernando Póo nombrado no por una federación sino por el Gobernador General a instancias del señor Quintana Delegado de Deportes,. Destacaba ya aquel joven entre sus compañeros y no creo que pensara hasta donde iba a llegar.

Creo yo que estos presidentes de los que hay muchos en el Mundo, se rodean de una serie de aduladores que les hacen creer que son semidioses y que si  abandonan el poder la nación se hundirá. Por otra parte cuando acuden a un acto público ven a una multitud que le aplaude y le vitorea( multitud preparada y guidada por unos mercenarios) y se autoconvencen que aquello es reflejo del sentimiento de la mayoría.
Luego se sienten como patriarcas de sus allegados, bien familia, paisanos de su pueblo o colaboradores, y a este se le regala un terreno, a aquel una parcela de poder a este otro se coloca en una multinacional que nos debe favores y se va creando una urdimbre dificil de deshacer. Esa urdimbre se defiende contra las opiniones contrarias, primero con palabras luego con los arrestos y hasta donde tengan que llegar.   

Espero que Tomás se libre del acoso de esa urdimbre, creo que lo único que conseguirá será levantar una bandera hacia la libertad, espero sea banderín de enganche para otros..

1 comentario:

fernando africano dijo...

Leo hoy en un diario que Juan Tomás ha llegado a España. Seguramente empaquetado por el Gobierno de Guinea.
Han sido prudentes antes de tener un enfrentamiento con las sociedades que luchan por los derechos humanos y tal vez presionados por algún gobierno europeo o USA, nos lo han enviado a portes pagados y sin reembolso.