GUINEA
Y SU ENTORNO EN LA
PRIMERA GUERRA MUNDIAL-VIII
(10.11.1916)
En
esta quincena, ha sido una verdadera afluencia de barcos, ¡ pero que barcos! Es
curiosa su reseña y hasta espeluznante.
Aquí
en la Colonia ,
se espera habitualmente el correo español hacia el día 25 de cada mes, pues
hete aquí que alguien lo ha aprendido, y ese mismo día 25 de octubre paseábase
delante de nuestra vista, satisfecho de su triunfo, un crucero de larga nariz
como aquí se dice, dando vueltas de gavilán en busca de su presa. Pasó y
repasó, ya casi nos daba miedo de si primero, no nos hubiera dado risa. Pero no
olió bien su presa o el sabueso necesitó ayuda para su heroica empresa. Tres
días después de su crucero de exploración, trájose por acá a su hermano mayor.
Vinieron así el día 28 el Astroea inglés y el Surcouf francés.
Hay
quien aventura que en vista de los numerosos casos de fuga de barcos alemanes
de los puertos de refugio, los aliados no ven con buenos ojos 6.000 soldados
camerones fuertes y robustos sumamente adictos a prestigiosos jefes, acampados en los
alrededores de Santa Isabel, que alberga en su puerto dos de esos barcos, que
aunque pequeños, pudieran servir para el objeto del transporte, conociendo como
conocemos todos, la increíble audacia de este pueblo modelo de patriotas. En cambio, hay quien afirma que ha sido una
forma de exigir la devolución a su tierra, de esos 6.000 soldados acampados en
esta población.
La
emoción ha venido del Cataluña, lo estábamos esperando para el 25, y llegará el
día 5. Por la mañana apareció la silueta de un barco, pero pasó de largo, no
era él. Otra vez asomó el morro el Surcouf, luego su silueta se perdió en la lontananza. Por
fin llegó el Cataluña el día 7 por la mañana. Esa misma mañana en un alarde de
fuerza aliada, cruzó por las cercanías un crucero de tres chimeneas al parecer
inglés.
NOTAS
DE BASILÉ
Este
pueblo que ya daba muestras de animación, desde que los alemanes procedentes
del Camerún lo han escogido por morada preferente, estos días se ha animado
mucho más, con el establecimiento en su cuartel, la Compañía de Infantería de
Marina, que ha llegado de España con el correo Cataluña.
Esta
Compañía del Regimiento de Expedicionarios de Infantería de Marina con destino
en Larache (Marruecos) donde prestaba servicio de campaña, se compone de 159
hombres entre sargentos, cabos y soldados al mando del capitán don Ramón
Rodríguez Delgado, y los tenientes Ángel Escay Maestre y Salvador Granage
Fernández. De la asistencia facultativa está encargado el primer médico de la armada,
don Antonio González Romero y el practicante don Francisco Rojas Benítez.
Día
25 de enero de 1917, funciona ya el horno de pan, para abastecimiento de tan
indispensable elemento a la tropa llegada.
Las
proximidades del cuartel de Basilé, se van convirtiendo en jardines, merced a
la actividad de la tropa. Se echa de menos el tren para el transporte de
víveres, que se verifica por medio de mulas guiadas por soldados, una vez que
los braceros subieron lo indispensable.
Estos
días en Santa Isabel se están celebrando las fiestas de onomástica de nuestro
amado rey. (Q.D.G.) A tal efecto se celebran regatas en la bahía. Merecen
mención los botes de Antonio Pérez que ganó dos veces, Monteiro y el de Aduanas
tripulado por marinos de Annobón del vapor Mediterráneo. Regatearon dos equipos
europeos, españoles e ingleses, llevando el premio la canoa de la Curaduría pilotada por
don Pedro. G. Amilivia, contra la misma Aduana.
El
día 20 fue el día de los barcos. Desde la mañanita vimos en lontananza
revolotear cual ave de mal agüero el pajarraco de siempre, que aparece cuando
hay algún barco que entra o sale del puerto y pensamos: No estará lejos el
Cataluña, cuando ya huele el Sourcouf, y así fue. A poco apareció la silueta
del nuestro, el barco de casa el Antonico.
El
día 22 después de percibir ecos lejanos de nutrido cañoneo, entró en nuestro
puerto el crucero inglés Astraea, que permaneció poco en nuestras aguas.
En
el Cataluña llegaron los jefes oficiales y clases que han de reemplazar en el
cuidado de los internados de Camerones a los alemanes que los condujeron desde
sus tierras.
Última
hora, acaba de entrar en puerto el cañonero Infanta Isabel, hoy día 26 de los
corrientes.
MI
COMENTARIO
Siempre
el cronista significa su germanofilia, tal vez basada en que los barcos
aliados, detenían y retrasaban la llegada a Santa Isabel de los correos, así
como que muchas veces expoliaban mercancía y víveres con perjuicio para la
población de Fernando Póo.
Es
de resaltar el costo que significaba mantener a los alemanes y cameruneses, con
el agravante de las tropas llegadas desde Marruecos, tal vez medida impuesta
por los aliados, para garantizar su vigilancia y posible huida.
En
las regatas sale el nombre de Antonio Pérez, fundador de la firma comercial
Frapejo en Guinea, así como G. Amilivia otra firma de gran prestigio en la Isla.
Fernando
el Africano 5 de diciembre de 2011
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