miércoles, 15 de julio de 2015

MANO DE OBRA CUBANA. CAPÍTULO II




                                      Cuando gané Wimblendown y me levantaron en hombros


MANO DE OBRA CUBANA- II

R.O. de 20 de julio 1862.-
Vista la comunicación de V.S. fecha 24 de mayo último, consultando a cerca de la manera en que han de ser considerados los doscientos emancipados próximos a llegar a esta isla desde Cuba, como también el régimen a que han de ser sujetos. Su Majestad la Reina ha tenido a bien disponer manifieste a V.S. que los referidos emancipados deben ser en todo momento, reputados como libres, que durante el tiempo determinado contratan su trabajo mediante un precio y la manutención, del mismo modo que hoy sucede con los krumanes. Al mismo tiempo Su Majestad se ha servido autorizar a V.S. para que después de dedicar a las obras públicas el número de estos trabajadores que ellos demanden , pueda repartir los restantes entre algunos de esos habitantes que inspiren las debidas garantías, quedando V.S. también autorizado para poner en planta un reglamento redactado sobre las bases del vigente en la isla de Cuba para el régimen de los chinos, de que se remite adjunto a V.S. un ejemplar inserto en la Gaceta, como también otros ejemplar de la ordenanza de emancipados que rige en aquella isla. Los contratos que se celebren con los emancipados no podrán n exceder del término de cinco años, aun cuando ellos quedan después en completa libertad de renovarlos voluntariamente. Su Majestad recomienda a V.S. que procure distribuir algunas tierras entre los cumplidos, y para que este pensamiento produzca todos sus buenos resultados, importa mucho que los emancipados adquieran hábitos de honradez y laboriosidad, objeto que solamente puede conseguirse inculcando en ellos el conocimiento y la práctica de los principios de nuestra santa religión por medio de las  exhortaciones, trabajos y ejemplos que la misión de la Compañía de Jesús, existente en esas posesiones.
R.O. DE 6 DE NOVIEMBRE 1862.-
Los trabajados que se van desarrollando en las posesiones que la Nación tiene en el Golfo de Guinea demandan el auxilio de brazos, cuya adquisición es en aquellas islas sumamente difícil. En vista de esas consideraciones se dispuso el envío de 200 emancipados de esa isla, que ha conducido a aquélla el vapor Ferrol y que han dado y están dando los mejores resultados; pero siendo un número muy pequeño y las atenciones de la colonia cada vez mayores, la Reina( q.D.g.) se ha servido encargue a V.E. abra una nueva convocatoria por otros 200 en los mismos términos que la anterior, adaptado todas las medidas de persuasión convenientes para inclinarlos a hacer voluntariamente el viaje.

MI COMENTARIO :
 El sistema me permite saber los que entran a leer los artículos que publico, y observo que en este último sobre la mano de obra cubana, solo se ha interesado una persona, cuando lo habitual pasa de los 50 y a veces llega cerca de los 500. Así que voy a dejar unos días para ver cómo va este segundo capítulo y en caso parecido, este se transformará en el último del tema.


Fernando García Gimeno 

1 comentario:

maria dijo...

Pues es interesante. Corrige la fecha del año que has puesto 1962.