domingo, 1 de abril de 2012

CAUSAS DEL FRACASO DE LA INDEPENDENCIA DE GUINEA ECUATORIAL

EL FRACASO DE LA INDEPENDENCIA DE GUINEA ECUATORIAL


Deseo explicar brevemente el fracaso de la independencia de Guinea, desde el punto de vista de un colonial, cuya familia estuvo muchos años vinculada a Guinea, de tal modo que mi abuela, mi cuñada y dos primos míos están enterrados en aquellas tierras. España. Varios primos míos nacieron en aquel paraíso, mi familia directa en aquella tierra, la componíamos unas cuarenta personas.

España cogió aquellos territorios pensando en el negocio de esclavos, en 1778, la muerte del jefe de la expedición conde de Argelejos y el fracaso del asentamiento en Concepción donde diezmada la tropa por falta de alimentos y enfermedades se levantan en protesta al mando del sargento Jerónimo Martin, toman como prisionero al teniente coronel don Joaquín Primo de Rivera, ello hace que en diciembre de 1781 se vuelvan a Montevideo de donde habían venido tras pasar por Santo Tomé. Quedando sus intenciones de explotación del territorio abandonadas. Cuando quiso reanudar esa explotación se firma el Tratado para la represión de la esclavitud el 23 de septiembre de 1817, al tener que renunciar a su primera intención, se compensa por Gran Bretaña a España con 400.000 libras, por dejar aquel vergonzoso comercio y vuelve a olvidarse de su Colonia guineana España.

El 27 de octubre de 1827, el capitán Owen tomar posesión de la isla de Fernando Poo en nombre del Gobierno del rey Jorge IV de Gran Bretaña e Irlanda, con la excusa o la intención de asentar en la misma el Tribunal para la represión de la esclavitud. Después de unos años de pérdidas humanas importantes por motivos de salud y el poco provecho que sacan de la isla, en 1834 deciden volver a trasladar el Tribunal a Sierra Leona.

En 1841 se inician conversaciones para vender Fernando Poo y Annobón al Gobierno inglés por 50.000 libras esterlinas y cuando ya estaba medio aprobado el proyecto ley, la oposición española logra desbancar el proyecto.

Para justificarse España manda al capitán Lerena con una expedición que sale del Ferrol el 18 de diciembre de 1842. Después de visitar el territorio en marzo de 1843 vuelve a España, dejando de gobernador al inglés Juan Beecroft, ya que no hay un solo español en la isla, salvo la pequeña guarnición que deja. Después de varias expediciones inútiles llega ya una con cierto peso que es la del primer gobernador español el capitán de fragata Carlos Chacón, que desembarca en Santa Isabel el 22 de mayo de 1858.

Para no alargar demasiado la evolución de la Colonia, diríamos que en los primeros años las enfermedades y fallecimientos de los colonizadores atrasaron el proceso dominador, cuando se dieron cuenta ya no les servía como negocio de esclavos al firmar el Tratado para la represión de la esclavitud, posteriormente se inician las guerras de independencia de las colonias en América y posteriormente las de Filipinas, de tal forma que arruinan el Estado español a la par que avisan a los grandes inversores el peligro de invertir en países lejos de la Metrópoli. Después entra en una Guerra Civil que merma su capacidad en todos los aspectos, carece de barcos para establecer un enlace de comunicaciones, faltan todos los productos básicos tanto de alimentación como de construcción, así que verdaderamente nos encontramos en 1930, que en la Colonia no existen carreteras de enlace para favorecer el transporte en la agricultura, de la Península no nos pueden llegar materiales para la construcción ni telas ni tan siquiera personal tecnificado. Partiendo incluso de esa fecha, podemos asegurar que España no se ha beneficiado o explotado Guinea nada más que 38 años de 1930 hasta la independencia en 1968.

Se le critica a España la poca inversión económica en Guinea, ya hemos dado las razones, éramos un país arruinado y con muchas guerras a su espalda., Guerras coloniales en América, Filipinas, y Guerra Civil, así como aislamiento en las dos guerras mundiales. Escasos universitarios nativos para ocupar cargos y desarrollar la Independencia. Si comparamos toda Guinea Ecuatorial con una población en 1968, cercana a los trescientos mil habitantes y algunos pueblos de España, como por ejemplo Mostoles en Madrid y Hospitalet en Barcelona, superan esa población y tampoco tenían Universidad.

Para entrar en la Universidad, era necesario el bachiller, bien en Santa Isabel existía un Instituto de Enseñanza Media donde se cursaba el Bachiller. Dependía del Ramiro Maeztu de Madrid. En el curso de 1950, en el séptimo año de Bachiller que era el último, en clase solo éramos dos alumnos Manuel Kombe y yo. Así que montar una Universidad para dos alumnos hubiera sido imposible, como nefasto era el tener 10 profesores para impartir el séptimo año de bachiller a dos alumnos.

Independiente de la situación económica y lo escaso de la población, otro punto importante es que el Gobierno de España, pensaba que primero darles la categoría de provincias españolas a esa región y posteriormente concederles la autonomía era suficiente para frenar la ebullición africana en sus independencias. Cuando la ONU ya les exigió ese camino debían haber enviado a España un nutrido número de estudiantes de la Escuela Superior Indígena y matricularlos en diferentes universidades españolas, aunque es cierto que mandaron bastantes. Y sobre todo no tener la urgencia de fijar la fecha de la Independencia pese a la presión internacional. Hacer comprender a los diferentes jefes de partidos políticos que se habían formado de demorar esa fecha, aunque fueran cediendo la gestión política a los ganadores de las elecciones autonómicas.

Otra de los mayores problemas es la mayoría fang ante las demás etnias. Si España hubiera sido inteligente habría logrado dar la independencia separada a Fernando Poo y Annobón de la parte Continental, convenciendo para ello a los fernandinos quienes algunos se dejaron seducir por los cantos de sirena de Macias. Eso tenía un problema oculto, que es el número de trabajadores nigerianos era mayor que la población nativa, pero es cierto que en esa aspecto Nigeria oficialmente nunca inquietó.

De darlo como se dio conjuntamente, se tenía que haber buscado una fórmula de estado federal que España hubiera sido el velador, en cuyo texto tanto Annobón, los ndowe y los bubis no pudieran ser avasallados por la etnia dominante actual, aunque lo triste es que quien gobierna es un clan.

Otro factor importante es que el gobierno dejó a un embajador con total desconocimiento del país y poca habilidad diplomática como demostró en el conflicto de las banderas y otros. Con igual o mayor torpeza el Ministerio de Asuntos Exteriores no supo ser generoso o habilidoso a la hora de financiar la Independencia. Les dejó el mismo presupuesto que para la autonomía, cuando precisaban crear un ejercito, unos ministerios, una estructura de funcionarios y un ministerio de asuntos exteriores. Al consumir el escaso fondo económico que tenía, brotó la locura de Macias de pensar que los españoles tenían el dinero escondido debajo de los colchones, cuando la realidad era que los españoles que habitaban la Colonia eran simples trabajadores o funcionarios, los posibles capitalistas estaban en España.

Concretando Un país sin universitarios, sin reservas económicas y que les da su Independencia un Ministerio lleno de incompetentes. Un Gobierno Español que ni dejó votar a los españoles que llevaban generaciones viviendo allá, pero lo grave es que ni les consultaron ni se dejaron aconsejar por ellos ni solicitaron informes al funcionariado de aquellos territorios. Tontos pero de carnet.

Como final pongo una anécdota que cuentan aunque no tengo la certeza de ser verdad sobre la inteligencia de Macias, hombre astuto pero incapacitado como demostró (El peor preparado de los políticos guineanos). Dicen las malas lenguas que lo primero que hizo fue ordenar que lo llevaran al Banco y obligó a abrir la Caja fuerte para ver el dinero de todos los españoles que suponía acumulado dentro de aquella cámara. Al abrir y ver lo escaso de su contenido salió hecho una furia.



Fernando el Africano Barcelona a 1 de abril de 2012

No hay comentarios: