MISCELANIAS DE OTROS TIEMPOS -11
10-09-1908 .—
Además Del barquito pescador “Telégrafo” que va a llegar el
día 20 de este mes, propiedad de R. Giménez, se cree que el día 15 de este
mismo mes ha de llegar a sus dueños los señores Wilson y Maximiliano (Jones)
una lancha vapor bastante capaz, para hacer viajes comerciales semanalmente en
días y horas fijos, hacia San Carlos y Concepción. La colonia está de
enhorabuena.
25-10-1908.—
Hace un mes que se hundió frente a Basuala, una regular
ballenera propiedad del lagos (natural de Lagos- Nigeria) llamado Ceferino
Aenefa pereciendo dos hombres y perdiendo toda la carga que conducía.
10-10-1908.— NOTICIAS SUELTAS
El día 29 salió el Corisco para Duala para proveerse de
carbón, pues por falta de dicho elemento andan los vaporcitos muy apurados.
El mismo día, al anochecer, llegó el Elobey de su viaje de
circunvalación por la Isla. Su
estado deja mucho que desear.
El 8 de los corrientes salió para Duala el velero Telégrafo
con el fin de estudiar los bancos pesqueros. Al propio tiempo llevaba la
correspondencia para el rápido alemán del día 9. Aunque velero, no dejará de
prestar dicho barco servicios a la
Colonia.
Los que creíamos que el Telégrafo sería algún barco
decrépito que venía a dejar sus costillas junto al Dos Hermanas y el Magallanes
y tantos otros, quedamos gratamente sorprendidos al saltar dentro del mismo. Se
encuentra en perfecta conservación, está construido de pinotea del mejor pinar
de Canarias, sus cuadernas completamente enteras, sin remiendos y sin esquinas
astilladas. Tiene 15 brazas de eslora por 4 de manga. Su movilización se
efectúa mediante sistema completo de velas que le permite aprovechar cualquier
viento que no sea del todo contrario. Lo
que más llama la atención es el estanque situado en el centro, de unos tres
metros de profundidad, con orificios que comunican con el mar, por los que
entran sardinas y pescaditos con que se sustentan los peces prisioneros. Vimos
uno que llevaba más de tres meses en el estanque. La dotación del velero es
actualmente: un capitán, un piloto, un contramaestre, un cocinero y cuatro
marineros, todos europeos
25-10-1908 DESAPARICIÓN
DE UNA CASCADA
Un fenómeno geológico muy curioso pero sencillo de explicar
acaba de tener lugar en el sur de esta isla.
Entre los muchos ríos que juguetones recorren el hermoso y
feraz sueldo de Fernando Poo, existe uno llamado Ariha muy poco conocido de los
europeos pero célebre en demasía entre los indígenas y visitado más de una vez
por los misioneros españoles.
El río Ariha debe tener su origen en el lago de Moka; pero
no se manifiestan sus aguas sino muy lejos del lago, en las laderas del valle,
desde donde se lanzan impetuosas hacia la playa para ir a desembocar en el mar
entre las puntas Santiago y Jesusa en donde algún tiempo se estrelló el
balandro del corisqueño llamado Uduma.
Como unos dos kilómetros antes de llegar a la desembocadura
del río ha desaparecido la célebre cascada llamada por los bubis Ariha, también
lo mismo que el río, y que medía unos 30 metros de altura haciendo sus aguas al caer
tan grande estruendo que se percibía muy bien a media hora de distancia.
No hace mucho tiempo que uno de nuestros misioneros se
hallaba de excursión en aquellos lugares visitando las casas de aquellos
isleños tan separados del resto de sus paisanos. Al amanecer de un día claro y
sereno se le presentaron algunos cazadores y llenos de asombro le dieron cuenta
del fenómeno ocurrido en aquella misma noche.
El misionero, que a pesar de los 16 años en el país conserva
muy buenas piernas, inmediatamente se puso en marcha, camino del suceso, con el
objeto de observar por si mismo el terreno y contemplar del cerca el fenómeno
que tanta admiración y asombro produjo en aquellos indígenas.
Llegó al río, y efectivamente echó de menos aquella hermosa
cascada, frente a la cual tantas veces había entonado himnos de alabanza al
Creador de tan grande maravillas. El río, sin embargo seguía su curso lanzando
el agua a borbotones por el pie del acantilado cual si fuera un nuevo manantial
o la misma madre del Ariha.
No obstante la ocultación de la cascada, se percibía el
estruendo de las aguas como antes aunque algo más lejano y subterráneo, por lo
que subiendo el río arriba nuestro excursionista no tardó en encontrar la
filtración del río en un abismo de más de 20 metros de hondo por
unos seis de ancho abierto bajo la acción demoledora de las aguas.
De lo dicho resulta que la cascada no ha desaparecido
propiamente hablando, sino que ha retrocedido unos 123 metros más atrás
dejando en el cauce del río un magnífico puente natural, si, pero que a nadie
aconsejamos el paso del mismo, por el peligro grandísimo a que exponga su
propia vida.
Aseguran los bubis de aquella comarca haber visto subir los
tiburones en las mareas llenas hasta el pie mismo de la cascada, pero sea de
ello lo que fuere, lo cierto es que tanto en marea alta como en marea baja hay
muchedumbre de hermosos pececillos.
Volviendo la vista al fenómeno geológico del Ariha no es de extrañar que así haya sucedido
en un terreno tan escarpado y formado exclusivamente por rocas como es casi
todo el de nuestra isla. Sabida de todos,
la acción mecánica que ejercen las corrientes de agua tanto subterráneas
como superficiales en toda clase de rocas. Unas veces, la misma agua, las
piedrecitas y guijarros arrastrados por la corriente líquida penetran por entre
las aberturas de las rocas a manera de barrenos abren profundos agujeros en los
cauces de los ríos, debiéndose a este fenómeno las filtraciones continuas que
echamos de ver en casi todos los ríos de esta isla de Fernando Poo.
Otras veces, y esto acontece en todas las cascadas, los
granos y cantos lanzados por la corriente desde lo alto de una cascada se
detienen al pie de la misma sin poder seguir su curso, y entonces el salto
mismo del agua les imprime un movimiento circular y de vaivén, en virtud del
cual, minan continuamente el pie del acantilado hasta lograr que se desplomen
rocas inmensas del acantilado dando lugar así al retroceso secular de las
cascadas en dirección contraria a la corriente de las aguas.
De lo dicho se desprende claramente que la cascada Ariha ha retrocedido 12 metros , obedeciendo a
unas leyes impuestas por la naturaleza por el Señor de todo lo criado.
No estará por demás advertir aquí que nunca como en la época
de lluvias se palpan los efectos geológicos
del agua sobre la superficie de la tierra, ya por medio de hundimientos,
ya también, si el agua de la lluvia es torrencial, arrancando de cuajo árboles
seculares que muchos, muchos años habían resistido los vientos huracanados. Es
por consiguiente una verdadera temeridad el bañarse en los ríos a la sombra de
algún corpulento árbol o en las playas dentro de los agujeros de las rocas.,
por el inminente riesgo que se corres de quedar sepultado a la hora menos pensada.
León García C.M.F.
MI COMENTARIO
En las diferentes noticias que he transcrito se observa que
los llamados fernandinos, o sea emigrantes procedentes de otros países
africanos, eran muy activos y montaban negocios de todo tipo, entre ellos los
de transporte de mercancía. Destaca entre ellos Maximiliano Jones quién destacó
por organizar el transporte marítimo (el único posible) entre San Carlos la ciudad donde estaba su sede
central y Santa Isabel y Concepción.
También se hace referencia a los muchos barcos hundidos en
las playas de la Isla ,
elolo era debido a la falta de cartas marinas actualizadas pero en muchos casos
a que los armadores cuando tenían un barco en mal estado lo embarrancaban en
aquellas playas, donde el asegurador casi no tenía forma de ir a verificar la
causa del hundimiento y tenía que pagar el seguro que cubría la póliza.
Fernando García Gimeno- Algete 5.01.2013